domingo, 9 de diciembre de 2018

LA PARABA NOBLE

Llegaba a la comunidad Santa Mónica en San Ignacio de Velasco, y mientras recorríamos la comunidad cercano a la cancha central, vi unas palmeras de Cusi, y en seguida agudicé la vista, tenía la esperanza de verlas y ahí estaba, Diopsittaca nobilis, llamada paraba noble y que aunque es pequeña para ser guacamaya o paraba, con sus 30 a 35 cm de longitud, mantiene otras características de estas como su estrecha  y larga cola, su fuerte pico, y el área periocular desnuda. De las tres subespecies identificadas: D. n. cumanensis (Lichtenstein, 1823), D. n. longipennis Neumann, 1931 y D. n. nobilis (Linnaeus, 1758) sólo la segunda se ha registrado en Bolivia, cuya principal característica es que el maxilar superior es decir el pico superior es blanquecino o color crema mientras el inferior es negro, también tiene la frente más azulada. 

Pesa entre 130 a 170 gramos y se estima que su espectativa de vida es de unos 30 años. Andan en Bandadas muy bulliciosas o en parejas, hace nido en huecos de troncos donde coloca al rededor de 4 huevos con un periodo de incubación de 24 días, posteriormente los polluelos abandonan el nido unos 54 días después.

 Se distribuye por Bolivia, Brasil, Guyana Francesa, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela.  Una característica persistente en su hábitat preferido es la presencia de palmeras, especialmente del género M. flexuosaOrbignya martiana y Maximiliana maripa(esta última especialmente en la región sur de la Amazonía) o Attalea speciosa o mejor conocido como cusi, que es el caso de la foto. También observados en las zonas pantanosas con palmas, bosques de galería y zonas cultivadas.